Keep on Walking
Tras volver una ya conocida reacción de mi cuerpo a la histeria del momento, me encontré sola en el baño potando. Pero aun así todo podía ir a peor.
Noche de cine, me dije, bien, Coixet no me decepcionó, cierto que no es su mejor película... pero yo necesitaba llorar y solo ella sabe como conseguir que no quede ni gota de rimel en mis ojos.
Están siendo unos días extraños, de callarse más de lo que s habla, de silencios sin precio y de confesiones a media voz. De saber que hay cosas que no se te pueden decir y de querer creer que son esas mismas cosas las que tu no me puedes decir a mi.
Se que todo está a punto de cambiar, llegará un día en el que no recuerde ni tus ojos a través del cristal ni tus manos a través de la ropa, pero por ahora... deja que siga haciéndome daño cada vez que lo recuerdo, deja que sufra al recordar donde estas tu ahora.
El desamor... al hablar de cine es tema obligado, y al hablar de Coixet todavía más.
La película te puede afectar más o menos, algunos somos más sensibles pero no creo que nadie pueda soportar una frase como "me corto un poco cada día para no echarlo de menos" sin derrumbarse.
Coixet hace además las veces de operadora con unos contraplanos desasosegantes, una película muy suya, muy de agradecer en estos tiempos que corren, nos devuelve la fe en los pequeños detalles...
Tanto que tras eso llegué a una casa vacía y con un cigarro y un vaso de vino disfrute del viento y el frío propio de las estaciones cálidas, de esa brisa que ayuda a que no nos ahoguemos. Tras eso todo siguió igual... tu voz al otro lado y otra vez el odioso litio, pero nada mejoró, ni contarnos todo lo que teníamos que contaros.
Necesitaríamos una banda sonora triste para estos días, pero no, usemos la época más rockera de U2... usemos el "War" para pasar estos días de mierda... démosle con un canto en las narices al jodido fatum con nuestra entereza.
Es tiempo de demostrar quienes somos en realidad Cicely, que clase de personas somos. Es tiempo de respirar hondo y tratar de caminar con la cabeza bien alta, tiempo de escribir todas esas cosas que queremos decir en nuestra Moleskine... para recitárselas luego a un azulejo en la ducha.
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