Que alguien mate al dragón del silencio

Para todos los que buscan una definición de todo esto, ahí os va una simple: botella de martini, incluso con 40º fuera sin hielo.
Se puede decir que hay quien lleva mejor que otros lo de las palabras, yo no soy muy buena y creo que por culpa de eso acabe borracha el sábado por la noche, el día de las llamadas, cuando por primera vez me vi y me sentí sola, por no haber sabido hablar y por no poder hacerlo ahora. Me asaltó un miedo que ahora se repliega por todo mi cuerpo, por creer que rizando el rizo, estilizando verdades que aunque compartimos cuestan, podía evitar que siguiésemos hablando de lo mismo... a pesar de lo que nos gusta.
Si te sirve de algo con lo que me dijiste justo antes le borraste por completo, cualquier posibilidad de sonrisa sincera, y propiciaste la segunda copa, y la tercera y mil preguntas... y yo como siempre intentando solucionarlo con palabras, algunas ni mias.
Y creeme, no se que más hacer desde aquí. Me he quedado sin palabras, se que no nos hacen falta, pero es que ya no tengo ni la seguridad de tener el as en la manga para hacerte sonreir, para aseurarme de que en gran parte yo soy la culpable de que siempre lo hagas.
A lo mejor la solución es la clásica esa que como todos sabeis me gusta tanto: tiempo. Una tregua en silencio.
Si te sirve de algo, la otra parte te hubiese echo mucha gracia otra sarta de imágenes para el recuerdo y tu disfrute personal, muchos te lo dije, mitos caidos Darcys que se quedan en Wickhams.., superan a las demas con creces pero ya sonreiremos, sonreiras, lo que sea. Ya se verá, ya se verá... que alguien mate al dragón del silencio.

XxX.

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